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España es el país de Europa con mayor despliegue fotovoltaico en 2022, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE). Los paneles solares están arrasando en nuestro país, lo que está suponiendo un fuerte espaldarazo laboral -con la contratación estimada de 74.250 empleos directos e indirectos durante el pasado año- y, por supuesto, un apoyo muy positivo en el reto de la reducción de la huella de carbono y la contaminación.
Sin embargo, no todo son buenas noticias en esta coyuntura que está dejando al margen el factor más importante de la ecuación: la seguridad laboral de los instaladores que realizan trabajos en altura. Desde Kee Safety hemos comprobado que, por lo general, las empresas de instalación de paneles solares no suelen incluir una partida de seguridad. ¿El motivo fundamental? No encarecer sus presupuestos. Una controvertida decisión que, sin duda, puede salir, paradójicamente, demasiado cara.
Las empresas de instalación de paneles solares no suelen incluir una partida de seguridad para no encarecer sus presupuestos
El año pasado, y según datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social, aumentó en un 17% los accidentes laborales mortales en nuestro país. Las caídas en altura, también. Por ello, desde Kee Safety entendemos que es imprescindible que todos los proyectos de instalación de paneles solares incluyan una partida destinada a seguridad laboral, realizada por una empresa especializada que analice cada situación concreta y realice las recomendaciones de soluciones de seguridad oportunas en cada caso: desde plataformas de trabajo hasta líneas de vida, pasando por pasarelas de seguridad, puntos de anclaje o barandillas de seguridad. No existen estrategias estandarizadas que se puedan aplicar de forma general.
Cada cubierta donde se instalan placas solares tiene configuraciones y accesos diferentes que dan lugar a una PRL en trabajos en altura y a ejecutar unas medidas preventivas para trabajos en altura muy distintas y por eso es fundamental que sea una empresa especializada en seguridad laboral la que lleve a cabo un estudio previo personalizado y determine las recomendaciones específicas.
Es importante recordar asimismo que la responsabilidad última en caso de accidente laboral recaerá siempre sobre el cliente final, ya sea una empresa, una comunidad de propietarios o un individuo particular. Una responsabilidad legal, añadida a la evidente de haber puesto en riesgo la vida de una persona, que implica sanciones económicas de hasta más de 600.000 euros.
Para cualquier duda y más información, ¡estamos a tu disposición!